Del cerdo se aprovecha hasta los andares, reza el refranero. Van a disculparme la comparativa, pero no puedo evitar pensar en cierta analogía entre la situación de la mujer y el cerdo doméstico. Si la situación de la mujer actual viene precedida de etapas durante el desarrollo social basadas en su domesticación en calidad de productora de vida en los límites de la economía natural cerrada, en la actualidad podemos observar cómo la capacidad reproductiva de la mujer sigue siendo objeto del mercadeo más vil bajo el capitalismo y la era de la técnica.

Hace poco salió a la luz la noticia del primer trasplante de útero hecho en España con una  donante viva. La donante, hermana de la receptora, necesitó de largas horas de intervención quirúrgica y de una veintena de especialistas autorizados; entre ellos, cirujanos y ginecólogos que se prestaron a tales fines éticamente cuestionables. La razón de dicho trasplante, que aboca al tratamiento de por vida a la paciente y a la muerte prematura orgánica de las funciones del aparato reproductor femenino de la donante, es la imperiosa necesidad de la trasplantada de concebir un hijo biológico.

Si las mujeres han sido explotadas de todas las maneras posibles mediante su capacidad reproductiva, no iban a ser menos las capacidades correspondientes a su sexualidad: vientres de alquiler, prostitución, pornografía y, lo último para el mercado neoliberal, los propios fluidos corporales.

[…] En enero de 2020, Gwyneth Paltrow nos sorprendía con su exitoso negocio de ventas de velas aromáticas con olor a vagina comercializadas a través de la marca Goop, marca valorada en 225 millones de euros según The New York Times… El negocio de la venta de leche materna no se queda atrás, el tráfico de este producto natural se ha convertido en otra mercancía más que puede adquirirse a través de páginas de compra y venta habituales…La orina de las mujeres pobres lleva años siendo explotada a través de la donación… Existen también páginas y foros en internet en los que se exponen consejos y recetas para dar múltiples usos a la placenta…

Cuando ya no haya más que explotar por fuera, nos explotarán por dentro: orina, flujo vaginal, órganos, sangre, sudor y lágrimas, y cuando ya no hay nada que explotar por dentro, serán explotados hasta nuestros andares, aunque para eso ya se están fabricando úteros artificiales que emulan los movimientos de la madre al pasear para un futuro feto. Vamos a pasar de ser putas a ser cerdas con toda su literalidad. Dinero llama al dinero, amigas.

Artículo  completo

 

Comparte esto:
Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad