Este fin de semana nos despertamos estupefactas con un artículo de la Directora del Instituto de la Mujer del Gobierno de España que señalaba la existencia de un “feminismo contrario a los derechos de las personas trans”. Esa aseveración que, por supuesto, es falsa, se enmarca en las estrategias de silenciamiento de opiniones, reflexiones y debates que, en todo el mundo, están poniendo en cuestión la existencia del “sexo” como una categoría biológica y jurídica.