Por Nuria Coronado para La Hora Digital. Com
Entrevista a Elizabeth Tarrío, médica del Servicio de Urgencias Canario e integrante del grupo de Salud, infancia y detransiciones de la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres
Cada día son más las voces que, de forma urgente y clara, están denunciando el maltrato que supone para menores que simplemente no se adaptan a los estereotipos de género, la denominada “infancia trans”. Una etapa vital que ahora el Ministerio de Igualdad pretende legalizar como norma con el anteproyecto de Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual. Según la ministra Irene Montero permitir cambios de sexo sin profesionales que validen el proceso o que menores de edad tomen bloqueadores hormonales desde la pubertad como supuestamente inocuos y con efectos reversibles, es lo mejor.
Elizabeth Tarrío, es una de estas voces que claman al cielo por ello. Ella como médica del Servicio de Urgencias Canario e integrante del grupo de Salud, infancia y detransiciones de la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres sabe la aberración de esta realidad. “En mi profesión siempre he tenido la idea de que el mejor tratamiento médico es aquel que se evita, que hay que utilizar los fármacos y la cirugía sólo en los casos necesarios y que la mejor medicina es la preventiva. Educar a niñas y niños libres de imposiciones sexistas en una sociedad en la que puedan desarrollar su personalidad sin etiquetas ni estereotipos es el mejor tratamiento preventivo para la disforia de género”.