Raquel Rosario es una escritora, investigadora y activista de la República Dominicana.
El propósito de este evento es explicar las implicaciones jurídicas y sociales de las políticas de “identidad de género” para todas las mujeres, y en realidad para toda la población. La realidad es que, a pesar de que vivimos en un patriarcado y el propósito de estas políticas es efectivamente borrar a la mujer de los estatutos legales y de las políticas públicas, algunos de los efectos también afectan a hombres y a niños.
Primero que todo quiero darle las gracias la Asociación Mujeres Progresistas de Retiro por la valentía de patrocinar este evento. Este es un tema contencioso que hoy día se está debatiendo única y exclusivamente gracias al esfuerzo de mujeres valientes como ellas. También, muy especialmente, quiero darle las gracias la periodista Nuria Coronado Sopena por organizarlo y por conseguir mujeres brillantes como la doctora María Sainz, la periodista Lucia Etxebarría y la abogada Paula Fraga como ponentes para hablar sobre un tema tan importante.
En España, esta amenaza misógina contra ustedes tiene nombre y apellidos: la llamada “Ley Trans” que su ministerio de Igualdad pretende promover a la fuerza y en contra de las objeciones de las aquí presentes. Como explica la Asociación Mujeres Progresistas de Retiro, esta ley “supone de facto la introducción en nuestro país de la ideología queer, que consideramos misógina y de consecuencias nefastas para las mujeres porque pretende borrar nuestra lucha por la igualdad, creando un neolenguaje que nos hace invisibles.”
La realidad es que, en España, así como en muchos países alrededor del mundo, la imposición de políticas de “identidad de género” viene dándose desde hace muchísimo tiempo. Nada de esto es nuevo. Ustedes han visto como varias leyes autonómicas ya han aprobado el borrado jurídico de las mujeres, y todo esto fue antes de que las mujeres se dieran cuenta de las implicaciones de estos cambios para sus derechos, y los derechos de las generaciones venideras.
Esta imposición de políticas de “identidad de género” es incluso a pesar de las legitimas objeciones de un sinnúmero de feministas legendarias que, responsablemente, han decidido usar sus voces y su legado para no echar a perder las conquistas por las que han batallado toda su vida. La opción no era solo hablar: fácilmente ellas podrían haber elegido ser cómplices del borrado de ellas mismas y de sus décadas de activismo o hacerse las ignorantes y pretender que no existe ningún problema entre las demandas de las políticas de “identidad de género” hacia el feminismo.
La situación del feminismo en España es curiosa, y hasta cierto punto es pionera en este asunto. ¿Por qué? Porque en España ustedes tienen un ministerio de la Igualdad que insiste con arrogancia que la llamada “Ley Trans” va, sí o sí. Y tienen un lobby organizado que utiliza todos los recursos del Estado, los medios de comunicación, las empresas privadas y las redes sociales para imponer su visión del borrado de las mujeres de manera abierta y desvergonzada. En muchos países alrededor del mundo, estas acciones se realizan de manera sigilosa y antidemocrática.
Lo admite el mismo lobby que busca imponer las políticas de “identidad de género” y el borrado de las mujeres. En diciembre del 2019, se filtró un reporte comisionado por la oficina de abogados más grande del mundo llamada Dentons, y la fundación Thomson Reuters, que es un conglomerado de medios de comunicación que promueve lo que ustedes llaman la ideología queer. Este reporte fue redactado con colaboración internacional de activistas pro- “identidad de género” de todo el mundo y consiste de sugerencias sobre cómo imponer su agenda más efectivamente. ¿Qué expresa este documento?
El reporte enumera un conjunto de tácticas para conseguir imponer y aprobar políticas de “identidad de género” a nivel internacional, sin crear un meollo en los medios de comunicación ni tener que darle explicaciones al publico respecto a las implicaciones de estas políticas públicas.
Es decir, este reporte es un dossier lobista sobre cómo lograr su cometido sin darle explicaciones a nadie.
“Esperamos que este reporte pueda ser una herramienta poderosa para activistas y para ONGs trabajando para avanzar los derechos de la infancia trans en Europa y mas allá,” expresan. Obviamente, lo que ellos llaman “infancia trans” son niños y niñas enteramente saludables pero que rechazan los estereotipos sexistas que les ha impuesto la sociedad. En vez de aceptar que hay niñas a las que les puede gustar el azul y jugar con coches, es mejor pretender que esas niñas tienen alma de varón.
El reporte llamado ‘¿Solo para adultos? Buenas prácticas para el reconocimiento legal de las infancias trans’ alega “se reconoce que los requisitos de consentimiento por parte de padres, madres o tutores representa un problema y una restricción a los menores de edad”. Es decir, los padres y madres de las personas menores de edad representan un obstáculo para los grupos lobistas que quieren medicalizar de por vida niños y niñas perfectamente saludables que rechazan estereotipos sexistas. Ese es el propósito de la maternidad y la paternidad, ¿verdad? Prevenir que personas malintencionadas dañen o mermen la salud de tus hijos y tus hijas. Pues, en este reporte esas madres y esos padres representan un enemigo.
Entre las recomendaciones está que las organizaciones LBGT deben “adelantarse al gobierno” y diseñar políticas públicas que respondan a sus intereses, para después acorralar al gobierno y presionarlo para que las apoye.
Expresa el documento:
“En muchas de las campañas de defensa de las ONG que estudiamos, hubo claros beneficios cuando las ONG lograron adelantarse al gobierno y publicar propuestas legislativas progresistas antes de que el gobierno tuviera tiempo de desarrollar la suya propia. Las ONG deben intervenir temprano en el proceso legislativo e idealmente antes de que haya comenzado. Esto les dará una capacidad mucho mayor para dar forma a la agenda del gobierno y la propuesta final que si intervinieran después de que el gobierno ya haya comenzado a desarrollar sus propias propuestas”.
Los gobiernos, bueno o malos, deben darle explicaciones a la población. Los grupos lobistas solo deben darle explicaciones a quienes los financian y a los grupos de interés que alegan representar. Por lo tanto, en el diseño de sus políticas publicas de “identidad de género” no tienen necesidad alguna de preocuparse en cómo afectan estas políticas de manera negativa a las mujeres, a la niñez y ni siquiera a la mismísima democracia.
Otra táctica bastante popular es esconder las políticas de “identidad de género” dentro de otras legislaciones más populares que le sirvan de amparo.
El documento dice:
“Vincula tu campaña a una reforma más popular. En Irlanda, Dinamarca y Noruega, se introdujeron cambios en la ley sobre el reconocimiento legal de género al mismo tiempo que otras reformas más populares, como la legislación sobre el matrimonio gay. Esto brindó un velo de protección, particularmente en Irlanda, donde el matrimonio gay fue apoyado masivamente, pero la identidad de género siguió siendo un tema más difícil para el cual ganar apoyo público”.
En España ustedes tienen una batalla abierta y frontal porque las intenciones de la llamada “Ley Trans”, ya son de conocimiento público. Su mismo ministerio de la Igualdad se ufana de su misión de promover “el reconocimiento legal del género” y lo que llaman “el derecho a la libre determinación de la identidad de género”.
En otros países, como la República Dominicana, la “identidad de género” está siendo introducida de manera sigilosa en políticas públicas y en proyectos de ley sin que se le explique a la población sus implicaciones. Por ejemplo, el controvertido concepto de la “identidad de género” está siendo introducido discretamente dentro de Proyectos de Ley de Violencia contra la Mujer, modificaciones a leyes de Trata y Trafico y en estos momentos se encuentra dentro de un Proyecto de Ley de Protección para las Personas Mayores.
Se alega que este proyecto “tiene por objeto crear un marco jurídico, sentar las bases institucionales y establecer los mecanismos que permitan garantizar el ejercicio de los derechos y la protección integral de la persona adulta mayor, sin discriminación alguna por razones de raza, sexo, edad, idioma, religión, opinión política, origen nacional, étnico o social, posición económica, condición de salud, discapacidad, orientación o conducta sexual, identidad sexual y de género o por cualquier otra condición social.”
La inclusión del “sexo” como categoría dentro de la tipificación propuesta, contigua a la “identidad de género”, es inoperable porque, por definición, el segundo obtiene automáticamente supremacía respecto al primero. El género (feminidad y masculinidad) se basa en los estereotipos sexistas asignados a las niñas y a los niños al nacer, según su sexo. La “identidad de género” dicta que, una mujer que se identifique con la masculinidad debe ser considerada del sexo masculino y viceversa. Este punto es delicado, ya que erosiona la naturaleza biológica que delinea a ambos sexos, y las políticas públicas que devienen de esa diferenciación, al facilitar a personas individuales autoidentificarse indistintamente en la categoría que prefieran.
A veces son un poco más sutiles y utilizan el concepto “género” como una rendija para facilitar el borrado de las mujeres. Como explica la política Ángeles Álvarez: “Están introduciendo el concepto “igualdad de género” como sustituto de “igualdad entre los sexos” o “igualdad entre mujeres y hombres”. El caso es ocultar el origen del problema de la discriminación y desigualdad más extendida en el planeta”. La opresión contra las mujeres.
Otra técnica importante ha sido el silenciamiento de la opinión pública y el control de los medios de comunicación. Explican los lobistas LGBT, y cito:
“Otra técnica que se ha utilizado con gran efecto es la limitación de la cobertura y exposición de la prensa. En ciertos países, como el Reino Unido, la información sobre las reformas legales de reconocimiento de género se ha malinterpretado en los principales medios de comunicación y, como resultado, ha surgido oposición. En este contexto, muchos creen que las campañas públicas han sido perjudiciales para el progreso, ya que gran parte del público en general no está bien informado sobre los problemas trans y, por lo tanto, pueden surgir malas interpretaciones. En Irlanda, los activistas han presionado directamente a políticos individuales y han tratado de mantener la cobertura de prensa al mínimo para evitar este problema”.
Es decir, no dejen que esto se airee en la prensa. ¿Por qué? Porque mientras más escrutinio reciben estas propuestas, mas crece el rechazo ante las implicaciones. En Escocia, donde el gobierno actual supuestamente de izquierda se encuentra empecinado en imponer políticas de “identidad de género”, así como lo esta el actual gobierno español, una encuesta reciente demostró que solo un 20% de la población escocesa esta de acuerdo con los postulados de la “identidad de género” y se ha posicionado en contra.
¿A que nos referimos cuando hablamos de “implicaciones”? ¿Qué queremos decir cuando hablamos sobre el impacto negativo de las políticas de “identidad de género”?
Nos referimos a una pulverización de los derechos de la mujer, de la niñez y hasta de la libertad de expresión y de consciencia de todas las personas. Las implicaciones representan el fin de los espacios solo para mujeres, porque estos quedan abiertos para todo el mundo, incluyendo para depredadores sexuales y hombres con fetiches que quieren abusar de las mujeres. Esto lo hemos visto en casos como las cuotas femeninas dentro del Partido Laborista en Inglaterra y en México donde hombres candidatos a puestos electorales se disfrazaron de mujeres (utilizando ropa para mujeres), para malversar la cuota femenina. Esta cuota femenina tiene sus defensoras y detractores, pero debemos reconocer que es una conquista que le costó décadas al movimiento feminista. Hoy en día esos puestos electorales designados para mujeres están dándole la bienvenida a personas que se identifiquen como mujeres.
Una manera perfecta de demostrar el absurdo de las políticas de “identidad de género” lo observamos recientemente a finales de junio del 2021 en California, Estados Unidos. Y este es punto sobre cómo los conceptos de “sexo” e “identidad de género” son jurídicamente incompatibles. Donde un spa con secciones para hombres y secciones para mujeres (segregados porque se trata de un espacio en el que las personas están desnudas), permitió que un hombre que se identifica como mujer entrara al área de las mujeres donde:
#1 Pudo ver a mujeres y niñas desnudas
#2 Pudo mostrarle su pene a mujeres y niñas que no lo querían ver
En la gran mayoría de los países, existen leyes que prohíben el exhibicionismo. Es decir, que prohíben que una persona (usualmente los hombres) exhiban si cuerpo desnudo ante personas sin su consentimiento. Y existe una cantidad considerable de estudios académicos que demuestran que el exhibicionismo es la antesala de crímenes peores y violentos. Es decir, muchos hombres agresores empiezan sus conductas abusivas y violentas exhibiendo sus genitales a mujeres que no quieren verlo. Por lo tanto, este crimen no es una anomalía, sino que debe considerarse como un patrón de conducta que, a menos que se detenga a tiempo, puede desencadenar en violencia machista contra la mujer.
En el Wi Spa ubicado en Los Ángeles, ese hombre que entro al área de mujeres enseñándoles a niñas y a mujeres su pene se convirtió en una víctima oprimida y ellas en unas privilegiadas opresoras porque algunas de ellas objetaron a su presencia. Porque, por medio de su política de “identidad de género”, ese spa aceptaba que incluso cuando existían espacios segregados por sexo (para hombres y para mujeres), las personas podían identificarse dentro del sexo que les pareciera.
Es por eso que aseguro, y quiero recalcar, que “sexo” e “identidad de género” son dos conceptos jurídicos incompatibles, porque este segundo lo que garantiza es el libre acceso a los derechos basados en el primero.
Las implicaciones de las “políticas de identidad de género” y el borrado de las mujeres son que niños y niñas perfectamente saludables están siendo inducidos a una medicalización de por vida a procesos quirúrgicos i-rre-ver-si-bles que estos menores de edad no se encuentran en capacidad para comprender. En noviembre del 2021, China inauguro su primera “clínica de género” para menores de edad en la que ofrecerán evaluaciones, diagnósticos e intervenciones en menores de edad saludables. Los doctores alegaron, y cito:
“Esta clínica es necesaria porque están recibiendo casos de niñas adolescentes a las que les gusta jugar con coches, a las que no les gusta usar faldas y que han sufrido ansiedad y depresión después de la pubertad”.
¿Por qué esas conductas deben interpretarse como que esa niña es un varón?
Bloquear o detener el desarrollo de la pubertad de un niño o de una niña atrapa su cuerpo en un estado de infancia de por vida: sus órganos sexuales no se desarrollan incluso cuando alcancen la adultez y tenemos que empezar a preguntarnos en voz alta, ¿a quién le conviene que existan personas técnicamente adultas pero atrapados en cuerpos con órganos genitales preadolescentes?
El borrado de las mujeres se asegura de que las mujeres estén perdiendo puestos dentro de las competencias deportivas que les corresponden porque sus lugares están siendo cedidos a varones cuya fisiología le proporciona una ventaja desigual. En las competencias de boxeo, donde varones como Alana McLaughlin que después de 33 años viviendo como hombre se ha identificado como mujer.
Esto implica, simple y llanamente, que la violencia contra la mujer esta siendo promovida como una forma de entretenimiento. La gente que va a esas competencias de boxeo, y deportes similares, está pagando dinero para ver a un hombre cayéndole a golpes a una mujer.
Comentaba yo que España en cierto modo es pionero de esta lucha por los derechos de la mujer. Y es que España está a la vanguardia porque es el primer país en el que el feminismo, con F mayúscula, se ha plantado en contra de las políticas de “identidad de género.” Esto es inusual, porque lo común es que las organizaciones feministas sean cooptadas o se sienten presionadas para aprobar esta agenda, y por lo tanto, aboguen en contra de los derechos basados en el sexo. Pero en España, feministas históricas como Ángeles Álvarez, Alicia Miyares, Juana Serna y Amelia Valcárcel se han plantado abiertamente a favor de los derechos de las mujeres.
En un manifiesto titulado “Carta Abierta al Gobierno de España ante su intención de poner en marcha leyes que pretenden un imposible,” ellas expresan:
“Para el feminismo, el género ha sido siempre esa construcción jerárquica de los estereotipos sexuales que ha fundamentado la desigualdad y la opresión de las mujeres. Observamos con preocupación cómo, en lugar de rechazar tales estereotipos, se pretende presentarlos como una opción elegible, sin impugnar el sustrato de poder que conllevan. La expresión “género sentido” o “sexo sentido” aluden a algo esencialista y subjetivo, inverificable en sus consecuencias jurídicas, más allá del sentimiento interno.
El respeto a la diversidad es condición necesaria para una justa convivencia, pero no suficiente para resolver la desigualdad estructural entre los sexos. Pensamos que ello solo será posible aboliendo el género, no con su perpetuación o diversificación. La diversidad elegible no subvierte nada por sí misma. Si bien la sexualidad está influida por la cultura, no podemos negar que el sexo es un dato objetivo en sus aspectos genético, gonadal, hormonal, anatómico y genital. No puede hablarse de “autodeterminación del sexo” como ejercicio de la libre voluntad.”
En otros países, reconocidas feministas pretender ignorar el intenso conflicto entre los derechos basados en el sexo y las políticas de “identidad de género”. En uno de los países anglosajones que crearon esta problemática y que lo imponen de manera imperialista en los países de su periferia, una feminista histórica fue cuestionada: “¿Cuál es su postura ante el conflicto abierto entre la lucha por los derechos trans y la autodeterminación de género con una parte del feminismo? Porque algunas feministas alertan sobre el borrado de las mujeres”, a lo que esta respondió: “No, creo que todo el mundo tiene derecho a identificarse a sí mismo como se siente de forma auténtica”.
Esta es una respuesta que nos llama cuestionar las dinámicas del liderazgo dentro del movimiento feminista. Ninguna líder es perfecta. Esta noche del 12 de noviembre, donde tenemos un panel de mujeres estelares, puedo asegurar que ninguna de nosotras somos perfectas y que frecuentemente cometemos muchos errores. Pero, ¿cómo podríamos cualquiera de nosotras acceder al borrado jurídico de la mitad de la población? ¿Cómo deshacer la base sobre la que construimos nuestro propio trabajo? ¿Cómo apoyar la embestida más bestial contra los derechos de las mujeres, que es lo que representa el borrado de las mujeres?
Eso es lo está pasando en países en los que las feministas de renombre ceden este debate a grupos lobistas LGBT. Siéntanse orgullosas porque, cuando le llego la hora al feminismo español, no huyeron: dieron la cara y fijaron posición a favor de los derechos de las mujeres.
Como decía Gerda Lerner en La Creación del Patriarcado:
“El sexo hace posible que las mujeres tengan hijos. El género es el que asegura que sean ellas las que tengan que cuidarlos”.
Ahora, las políticas identitarias afirman que el género, como lo conceptualizamos las feministas, no es opresión si no es subversión y que lo moderno es celebrar el género, multiplicándolo cientos de veces de la manera más individualista posible.
El feminismo no es un movimiento individualista. Y es por eso que la brecha entre el feminismo que reconoce la importancia del sexo para la recolección de datos estadísticos, para la elaboración de políticas públicas para erradicar la violencia machista, para la investigación científica de enfermedades y síntomas, para la protección de los deportes, para asegurarle a cada niña y a cada niño que nadie nació en un cuerpo equivocado y para preservar los espacios seguros para mujeres, ese feminismo nunca compaginara con las políticas de “identidad de género”. Y jamás consentirá a que se borren a las mujeres y niñas.
Pero más importante aún, y más importante que todo esto que acabo de mencionar en este discurso, es que el borrado de las mujeres ha fallado rotundamente y la evidencia son ustedes. La persona que usted tiene a su lado derecho y a su lado izquierdo. Todas y cada una de las personas que hoy se levantaron, se cambiaron y se dieron cita en el Centro Municipal de Mayores son la evidencia mas clara de que el borrado de las mujeres, tanto estadística como legislativamente, será la ilusión perversa de algunos sectores misóginos y de algunos ministerios que no saben cual es su misión, pero no será la realidad jamás. Siempre y cuando las feministas se planten firmemente a favor de las mujeres y niñas, así como lo hemos dicho todas nosotras y lo seguirán diciendo muchas más que se nos unirán en el camino.
¡Muchas gracias!
Esta es una transcripción del discurso que Raquel Rosario Sánchez pronunció durante el evento ‘Mujeres, la Realidad Imborrable’, el 12 de noviembre del 2021 organizado por la asociación Mujeres Progresistas de Retiro